Convivencia Escolar

Una convivencia escolar sana, armónica, sin violencia, incide directamente en la calidad de vida de todos los miembros de la comunidad educativa, en los resultados de los aprendizajes, en la gestión del conocimiento y en el mejoramiento de la calidad de la educación.

Relacionarse con otros en paz es el fundamento de una convivencia social democrática, la cual se constituye en un aprendizaje que debe ser intencionado desde las prácticas pedagógicas, tanto en el aula como fuera de ella, asumiéndola como una tarea educativa/formativa que es de responsabilidad de todos los miembros de la comunidad escolar.

Desde el 2020 hemos adecuado nuestras acciones en función de los nuevos desafíos que nos plantea el contexto de la complejidad de la crisis sanitaria mundial, incorporando el aprendizaje socioemocional, el cuidado por la salud mental y el fortalecimiento de los vínculos entre aquellos que forman parte de la institución, serían (y son) un pilar fundamental para el manejo de la pandemia y sus efectos.

De esta manera, tal como se describe a continuación, ha dado continuidad, con criterios de dinamismo y flexibilidad a nuestros objetivos y tareas.

Para lograr esta convivencia pacífica y democrática entre los miembros de la comunidad educativa, ha sido necesario el aprendizaje y la práctica de valores como el respeto, la solidaridad, la ayuda mutua, entre otros, y el desarrollo de la capacidad de las personas para convivir en armonía.

En ese sentido, la tarea de educar en valores no está circunscrita solo al ámbito escolar; sino que también familiar.  Es por ello que se ha incluido la Escuela para Padres, para potenciar a nuestros Padres y Apoderados en temáticas de Parentalidad positiva.

El trabajo para promover la formación en convivencia y buen clima escolar se  intenciona a través de una planificación coherente y en sinergia con los diferentes instrumentos de gestión con que cuenta el Colegio, con el propósito de generar procesos de mejora organizados y sustentables en el tiempo en el marco del modelo de mejoramiento continuo del establecimiento educacional.

Es así como se puede pensar en:
  • Un Proyecto Educativo Institucional (PEI)
  • Un Reglamento de Convivencia Escolar
  • Un Plan de Mejoramiento Educativo (PME)

Desde el área de Orientación, el desarrollo vocacional tiene gran relevancia. Consecuentemente, la construcción de los proyectos de vida de los y las estudiantes representa un eje ante la gestión de oportunidades que faciliten: el autoconocimiento, el acceso a información actualizada que guíe la toma de decisiones.

“Aprender a convivir” es uno de los cuatro pilares del aprendizaje para el siglo XXI (Jaques Delors) que necesariamente tiene que desarrollarse en compañía de otros.

Atendiendo a este desafío, es que se cuenta con un Equipo de Convivencia Escolar, que se encarga de planificar, implementar y monitorear las actividades que se acordaron en el Plan de Gestión de la Convivencia Escolar, instrumento que busca materializar acciones que permitan movilizar a los integrantes de la comunidad educativa en torno al logro de una convivencia pacífica.

Nuestro Equipo

El Establecimiento cuenta con un Encargado de Convivencia escolar, que es la Sra. Carmen Gloria Larraín Iturrieta, quien en conjunto con el Inspector General, don Julio Duarte Dirigen el Equipo de Convivencia Escolar compuesto por:

  1. Cristian Ibañez Docente
  2. Yonathan Tamayo Docente
  3. Camila Fuentealba Docente
  4. Felipe Segura Docente
  5. María Fernanda Fuenzalida Facilitadora de Aprendizaje Socioemocional
  6. Macarena Fuenzalida Apoyo Técnico-Profesional
  7. Rosa Silva Inspectora
  8. Debora Tapia Inspectora
Funciones del Equipo de Convivencia Escolar
  1. Promover acciones, medidas y estrategias orientadas a prevenir la violencia entre los miembros de la comunidad educativa.
  2. Elaborar, en conjunto con el Encargado de Convivencia Escolar, un Plan de Acción para promover la buena convivencia y prevenir la violencia en el establecimiento.
  3. Participar en la actualización del Reglamento de Convivencia, de acuerdo al criterio formativo planteado en la política Nacional de Convivencia Escolar y los lineamientos del Proyecto Educativo del Colegio.
  4. En el caso de una denuncia de conflicto entre pares y/o acoso escolar, deberá tomar los antecedentes y seguir los procedimientos establecidos por el Protocolo.